“Do you feel what I feel?”: Can couple’s emotions be linked?


By Ashley K. Randall, M.S.*
Happy New Year!

I guess it’s the time to start making the new years resolutions, which appear to come up year after year: lose 10 lb., start walking everyday, call friends more often, attend more social events, volunteer, and quit smoking. BUT – can quitting smoking have NEGATIVE effects on your relationship????

Interestingly research has shown that couple’s emotions, physiology, and behavior are linked. There have been a number of terms that have defined this linkage, such as mutual influence, psychobiological attunement, synchrony, and coregulation. Therefore, relationships play a large part in how individuals can successfully regulate their emotions.

What is linked between partners?

Emotions. Partner’s levels of positive and negative affect were found to be linked, above and beyond the influence of their own daily interactions. Interestingly, this effect was greater on days when couples spent more time together.

Physiology. Psychological linkage in adult relationships can arise due to empathy or due to conflict. For example, physiological linkage between marital partners has been shown to be higher during conflict conversations than during neutral ones. In addition, in at least two studies linkage was negatively correlated with marital satisfaction, with less satisfied couples showing higher levels of linkage.

Behavior. Behavioral coregulation can occur through several modalities, such as touch, eye contact, facial expressions, and vocalizations from one partner to the other,

How can this happen?

One way this linkage can occur is through shared emotional experiences arising from jointly engaging in activities. 

Smoking.  One study found that couples in which both partners smoked were more likely to show high levels of shared positive emotions while smoking compared to couples in which only one partner smoked.

Nevertheless, this is not to say that engaging in healthy activities together cannot produce the same effect! Research has found that couple’s emotions are linked even when you control for those shared emotions.

Implications

Relationships can yield many outcomes: they can buffer against negative health outcomes or be a risk factor for mortality and morbidity for a wide range of diseases.

New research has begun to focus on how couple’s emotions are linked and what are some of the individual (attachment, personality) and dyadic factors (coping together, problem solving, relationship length, relationship satisfaction) that may impact the degree to which couple’s may feel the same things at the same time

Not that you need to think twice about quitting smoking – but think twice about how your relationship may be impacted. 



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References:


Broadhead, E. W., Kaplan, B. H., James, S. A., Wagner, E. H., Schoenbach, V. J., Grimson, R., et al. (1983). The epidemiological evidence for a relationship between social support and health. . American Journal of Epidemiology, 117, 521-537.
Butner, J., Diamond, L. M., & Hicks, A. M. (2007). Attachment style and two forms of affect coregulation between romantic partners. Personal Relationships, 14, 431-455.
Feldman, R. (2003). Infant-mother and infant-father synchrony: The coregulation of positive arousal. Infant Mental Health Journal, 24, 1-23.
House, J. S., Landis, K. R., & Umberson, D. (1988). Social relationships and health.
Science, 241, 540-545.
Levenson, R. W., & Gottman, J. M. (1983). Marital interaction: Physiological linkage and affective exchange. Journal of Personality and Social Psychology, 45, 587-597.
Levenson, R. W., & Ruef, A. M. (1992). Empathy: A physiological substrate. Journal of Personality and Social Psychology, 63, 234-246.
Randall, A. K., & Butler, E. A. (under review). Emotional coregulation in close relationships. Emotion Review.
Rohrbaugh, M. J., Shoham, V., Butler, E. A., Hasler, B. P., & Berman, J. S. (2009). Affective synchonry in dual- and single-smoker couples: Further evidence of 'symptom-system fit'? Family Process, 48(1), 55-67.
Saxbe, D., & Repetti, R. L. (2010). For better or worse? Coregulation of couples' cortisol levels and mood states. Journal of Personality and Social Psychology, 98, 92-103.
Schoebi, D. (2008). The coregulation of daily affect in marital relationships. Journal of Family Psychology, 22, 595-604.




*About the author: 
Ashley K. Randall is a doctoral student in Family Studies and Human Development. She received her Master's in Clinical Psychology from North Dakota State University and her B.S. in Psychology from Indiana University. During her Fulbright Fellowship (2007-2008), she spent time examining the role that stress plays on dyadic coping and its effects on romantic relationships. At The Magis Foundation she is an Executive Board member, director of the Couple's Corner and an  EduBlog contributor. 

Manejo de Depresión y Desarrollo de Resiliencia


Durante el mes de noviembre, hablamos sobre los síntomas de la depresión y cómo poder identificarlos. Este mes comenzamos nuestra campaña sobre manejo de depresión y desarrollo de resiliencia, con un “Twist” Navideño.

Socialmente, seguimos recibiendo un “feedback” negativo, con quejas, críticas y noticias negativas. Esto es todo lo que vemos en los medios, haciendo que nuestra frustración sea casi imposible de resolver. Sin embargo, debemos enfocarnos en la esperanza. La misma alimenta nuestra resiliencia, y nos ayuda a seguir hacia delante.

Según el Institute on Child Resilience and Family, la resiliencia es la habilidad para resurgir de la adversidad, adaptarse, recuperarse y acceder a una vida significativa y productiva. (1994)  Ésta no se considera un rasgo de la personalidad de un individuo, sino un proceso por el cual la persona la va desarrollando a su tiempo. La misma le da la fuerza psicológica a la persona para que maneje y se adapte a una situación difícil de forma positiva. Un ejemplo de esto es ver a una persona que pasa por una crisis pero no pierde la esperanza de que todo mejorará en su momento.

Durante la época navideña un número significativo de personas sufren de depresión, desde mínima hasta severa.  La ansiedad y estrés aumentan dado a la alta actividad y demanda familiar, económica y laboral que se da durante este tiempo. En los últimos años, se ha notado un alza en los casos de depresión en relación a la crisis económica del país[i]. En otros casos, aquellas personas que hayan sufrido una pérdida o crisis familiar (muerte, divorcio) pueden desarrollar una depresión provocada por la alta frecuencia de tiempo familiar durante esta época. También hay casos donde las personas se deprimen al sentirse solas durante la Navidad.

El manejo apropiado de esta depresión es la clave del éxito. Parte de ese manejo se enfoca en desarrollar la resiliencia necesaria para seguir hacia delante.

Existe una serie de factores que promueven el desarrollo de la resiliencia[ii]

§  La habilidad de acoplarse efectivamente al estrés de forma saludable.
§  La habilidad para resolver problemas.
§  Buscar ayuda profesional.
§  Creer firmemente que se puede hacer algo para manejar las emociones y acoplarse. 
§  Tener apoyo externo (social, familiar).
§  Mantenerse en contacto con familiares y/o amigos.
§  Hablar sobre la crisis o situación difícil con su sistema de apoyo (familia/ amigos).
§  Espiritualidad.
§  Ayudar a otros.
§  Encontrar un significado positivo en el trauma.

La meditación y prácticas espirituales ayudan a muchas personas a construir conexiones especiales y restaurar la esperanza[iii].  Dado a que estamos en la época navideña, colaboramos con varios líderes espirituales quienes participan activamente en el proceso de apoyo y desarrollo de esperanza de su comunidad. Durante momentos difíciles, cuando se ha perdido todo, desde lo material hasta la fe, lo que nos queda es la esperanza. La misma nos da fuerza para seguir. 


De esto nos comentan tres líderes espirituales:


El Padre Ricardo Gerena explica que en muchas ocasiones existe una gama de situaciones en la vida de las personas que hace que se alejen de Dios, e incluso pierdan su fe y espiritualidad, cuando existen dinámicas que disturban la paz interior y provocan la auto-tortura psicológica. En estos casos, explica, se le brinda la alternativa de la esperanza, la fe en sí mismo, la fuerza del amor y la esperanza. Hay cinco aspectos esenciales en la vida de cada ser humano en los cuales nos debemos enfocar: El amor, la justicia, el compromiso, la responsabilidad y el respeto. Estos son los fundamentos de la moral cristiana. Entre los pilares del cristianismo, una de sus grandezas es restaurarse en todos los aspectos. Reinventarse, reponerse y rehabilitarse son términos que tocan la virtud del cristianismo y la dignidad humana. El mayor obstáculo de un ser humano es el miedo. Nadie es perfecto, todos caemos; entonces debemos perder ese miedo y levantarnos con dignidad. Recordemos que Dios es la experiencia humana más destacada en nuestra sociedad y se basa en un concepto profundo del amor. Este amor externo e interno es la fuerza que nos energiza siempre, hasta en momentos de fragilidad emocional y espiritual. No podemos perder la fe en el amor de Dios ni la fe nosotros mismos y en nuestra capacidad de superar tiempos difíciles.

El pastor Osvaldo del Brey, expresa que debemos recordar durante la Navidad que el elemento más crucial es Jesús, quien rescata la dignidad humana. Todos somos importantes en los ojos de Dios. En momentos difíciles sentimos tristeza, pero el darnos por vencidos (y hasta considerar la muerte) no es una solución a la crisis ni una alternativa. Debemos caer en la esperanza y volver a la fe genuina mediante nuestra relación con Dios por medio de Cristo. De ahí nace la esperanza, ya que todo es pasajero y debemos ir construyendo el camino a la solución. Debemos deshacernos de la fe tóxica, de malinterpretaciones litúrgicas. Reformar nuestro concepto del Dios malhumorado que nos castiga y abrirnos al concepto de Dios como padre que nos ama, tal y como Él se auto-revela en la Biblia (Jn, 14). La fe tóxica nos enferma; nos drena emocionalmente. Recordemos la compasión de Jesús para con los menos afortunados, los marginados y los enfermos tal y como Él restauró la dignidad de estas personas con su amor y compasión.

Según el Pastor/Dr. Lionel Ramírez, las personas durante la Navidad deben enfocarse un comienzo nuevo para el nuevo año. Deben creer, en mente y corazón, que la crisis es una oportunidad para el cambio y resolución de problemas. Es un momento de bendiciones futuras, que se logra cuando las personas tienen fe en Dios. La Navidad, entonces, es una buena oportunidad para progresar ya que se tiene la seguridad en Dios como guía.

Si no es religioso/espiritual, aproveche esta época para buscar paz (interior y exterior). El alto nivel de actividad de la misma puede traer mucha ansiedad a personas que padecen de depresión. Es bueno que tome su tiempo y espacio para relajarse. Trate de mantenerse alejado de las cosas (y/o personas) que no aportan a su vida de forma positiva, especialmente la cadena de pensamientos negativos. Un pensamiento negativo lleva a otros, y culmina en agudizar la tristeza, frustración o coraje.  Siempre hay otro día, y qué mejor motivo para continuar una vida positiva que éste.  No pierda la fe en sí mismo ni la valentía para seguir adelante

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[i] Bernstein, Elizabeth (2008) Angst Is Rising, but Many Must Forgo Therapy The Wall Street Journal. Retrieved 12-1-2010. http://online.wsj.com/article_email/SB122333797880409755-lMyQjAxMDI4MjAzNzMwMzc3Wj.html

[ii] Agaibi, C.E., & Wilson, J.P. (2005). Trauma, PTSD, and resilience: A review of the literature. Trauma, Violence, and Abuse, 6, 195-216.

[iii] APA - Ten Ways to Build Resilience". Apahelpcenter.org. Retrieved 11-1-2010.




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*La autora, quien es psicoterapeuta de niños, adolescentes y familia, es la fundadora y presidente de The Magis Foundation.  Cursó sus estudios graduados en Loyola University New Orleans y trabajó en New Orleans, Louisiana con sobrevivientes del huracán Katrina. Entrenó en dinámica de familia, desarrollo humano, Play Therapy ®, duelo,  resiliencia y manejo de crisis entre otros.   Ella cuenta con varios años de experiencia trabajando con entidades comunitarias enfocadas en el desarrollo social, apoyo familiar, apoyo a niños y adolescentes y crecimiento personal.

Las Caras del Autismo: Perspectiva de una Madre


Por: Rebecca Maria A. Rivera*
La palabra "autismo" ha salido cada día más en la prensa y en los medios, dando la impresión que es un fenómeno recién descubierto en la isla. Para los cientos de padres y madres de hij@s autistas, la atención de los medios sirve de frustración como también de esperanza. 
Son muchos los que no entienden lo que es el autismo, pero para aquellos que lo viven, el diagnóstico es uno de gran impacto. Aunque ya estamos viendo tratamientos exitosos y mayor apoyo para estos niños, hemos notado que el apoyo disponible para padres, familiares y personas cercanas al niño autista siguen inaceptablemente limitados. 
Uno de los objetivos más importante de la alianza entre The Magis Foundation y Zona Desarrollo ha sido proveerle el apoyo necesario a tanto el niño (mediante terapias) como a su familia (mediante seminarios). El proceso que experimentan las familias, desde la sospecha hasta el diagnóstico oficial, es uno muy intenso y de gran reto. 

Algo muy importante que deben saber los padres y familiares es que no están solos.  Como parte de nuestro apoyo a padres, compartimos una entrevista a la autora  Vanessa Seijo, madre de un adolescente autista, quien comparte con nuestros lectores su experiencia de criar a un niño autista en Puerto Rico.


¿Cuando y cómo llegaste a descubrir que tu hijo tiene autismo? 

Mi hijo se desarrolló normalmente durante el primer año.  Empezó a hablar a los seis meses.  Durante ese año tuvo muchas infecciones del oído.  Cuando cumplió un año me di cuenta que dejó de hablar.  Todo lo que quería lo señalaba con el dedo.  Daba vueltas en círculos. Hacía filas de zapatos, de carritos.  No nos miraba a los ojos.  Si se sentía mal no sabía cómo decírnoslo.  Le molestaba que lo meciera.  Se dormía solo, no buscaba "ñoñete".  A los dos años y medio le dije al pediatra que el nene no hablaba.  Me dijo que le diera tiempo. A los 3 años y medio no aguanté más.  Mi vecina en ese momento trabajaba en las clínicas externas del Hospital Pediátrico en Centro Médico.  Ahí una batería de especialistas lo evaluó.  Al final de la última evaluación que fue con una trabajadora social especializada pude ver al chico con algo de distancia y me di cuenta que algo en definitiva estaba mal.  Luego el doctor nos explicó que el niño mostraba signos de autismo clásico.

¿Qué sentimientos tuviste al momento de enterarte? 

Mucha frustración.  Era mi primer hijo y uno espera que todo sea perfecto.  Aunque sabía que no era culpa de nadie esos pensamientos estuvieron ahí.  Hubo rabia y desespero y cuestionamientos. 

¿Cuál fue tu sistema de apoyo y cuál fue la mejor ayuda que recibiste? 

Desde el principio el doctor Valencia Prado y su equipo fue de gran ayuda a poner las cosas en perspectiva.  Mis padres y familiares nos apoyaron mucho.  Llevándolo a la escuela y a sus terapias.  Cuidándolo cuando fuera necesario.

¿Cómo ha sido el proceso de crianza de este hijo a través de los años? 

No ha sido fácil pero tampoco imposible.  Requiere mucha estructura y mucha disciplina.  Requiere el compromiso de saber que probablemente necesite guía el resto de su vida.  Ahora él está en salón regular en una escuela regular pero eso no se da de la noche a la mañana.  Hay que ser constante.  Buscar las ayudas necesarias.  Hasta pelear con el sistema educativo si es necesario.  Escuchar al niño.

¿Cómo se adaptaron tus otras hijas? 

Se podría decir que la chica del medio le enseñó a hablar.  Ella lo perseguía, le hablaba constantemente, lo obligaba a tener contacto diario con ella y a socializar con ella.  Lo sacó de su mundo.  Ellos se llevan muy bien.  La hermana del medio tiende a sobreprotegerlo y estar pendiente cuando hace cosas que no debe (como meterse cosas a la boca), la chiquita lo obliga a asumir su papel de hermano mayor y ayudarla.  Esa socialización entre hermanos le hizo mucho bien.

¿Qué retos enfrentaste al criar a un hijo autista en Puerto Rico?

El sistema educativo.  Hay mucha gente en puestos donde se toman decisiones que le hacen mucho daño a los niños y a sus padres.  Hay familias que han tenido que salir de Puerto Rico corriendo.  Hubo decisiones difíciles de cambios de escuela que nos costaron muchísimo en términos emocionales y económicos porque el sistema se negaba a aceptar que no tenían la ubicación apropiada en ese momento.    Pero de no haber tomado estas decisiones él no estaría donde está.

¿Algo que hayas aprendido que te hubiese gustado saber antes? 

Que cuando un pediatra le dice a una madre "dale tiempo" hay que pedirle el expediente del chico y salir corriendo de ese consultorio y buscar a un doctor que sí escuche a los padres.

¿Qué le dirías a padres de niños muy pequeños con autismo? 

Que no se rindan. Que las cosas se ponen más fáciles con el tiempo.  Que hay que tener fe.  Que no se pueden rendir.  Que se eduquen.  Que no permitan que funcionarios con ínfulas decidan el destino de sus hijos sin tomarlos en cuenta.  Que con el tiempo la vida gana su normalidad y ni se van a acordar que el muchacho tiene un diagnóstico.  Que no tienen un paciente, que tienen un hijo y que su primera y más importante misión es amarlo. ■

Colaboración especial entre The Magis Foundation y Zona DesarrolloPara más información se puede comunicar a: (787)-724-5559, (787)-644-9628 y (787)-410-5443. 

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*La autora, quien es terapista psicológica de niños, adolescentes y familia, es la fundadora y presidente de The Magis Foundation.  Cursó sus estudios graduados en Loyola University New Orleans y trabajó en New Orleans, Louisiana con sobrevivientes del huracán Katrina. Entrenó en dinámica de familia, desarrollo humano, Play Therapy ®, duelo,  resiliencia y manejo de crisis entre otros.   La autora cuenta con varios años de experiencia trabajando con entidades comunitarias enfocadas en el desarrollo social, apoyo familiar, apoyo a niños y adolescentes y crecimiento personal. 

Depresión en los Niños y Violencia Escolar ("Bullying")


La conducta violenta conocida como "Bullying" (Maltrato entre pares) se puede definir como un comportamiento negativo, dañino,  intencional y repetitivo, el cual se lleva a cabo por una o mas personas contra otra persona con dificultad de defenderse. (Olweus, 1985, 2005) 

Este problema ha llamado la atención en el campo de la salud mental desde la década de los 80's. Entre los hallazgos investigativos podemos notar que dicha conducta puede tener resultados negativos para tanto la víctima como su victimario. La misma se puede dar de varias formas y presenta una amenaza para el desarrollo emocional, social y físico de los niños de edad escolar, la cual puede persistir hasta la adolescencia tardía y la adultez. 

Es muy importante que los padres, maestros y comunidad escolar se mantengan al tanto de las conductas de los niños y que puedan identificar las señales del "bullying" en los niños eficazmente para poder manejar el problema inmediatamente. 


Existen varios mitos acerca de este comportamiento: 

  1. "Es cosa de niños": Los niños entran a una edad donde son físicamente muy activos y pasan una gran cantidad de tiempo con sus pares. La actividad relacional se da en forma de juego, competencia, y de forma verbal jocosa, como las burlas entre si para demostrar afecto mutuo. Sin embargo, hay que mantener la alerta ya que el juego entre niños puede ser violento, que el intercambio verbal ser ofensivo y el acoso darse de forma psicológica (por ejemplo: exclusión social, rumores). 
  2. El acoso escolar es solamente físico: El "bullying" puede darse de forma verbal tanto o mas que de forma física. Los adultos tienden a asociar el "bullying" con violencia física. El acoso puede comenzar de forma verbal, luego escalar a acoso relacional y a lo ultimo llegar a acoso físico.
  3. El acoso es la forma normal para ventilar conflictos: Los niños en su desarrollo van aprendiendo a resolver conflictos entre si. En muchas ocasiones la agresividad es inevitable mientras van madurando y adquiriendo competencias sociales. Sin embargo, el "bully" (victimario) no ha desarrollado esta madurez, y resolver conflictos de forma no violenta no le es de interés. 
  4. Las niñas no son victimarias: Aunque el acoso físico entre las niñas sea de menor frecuencia en comparación a los niños, el caso se puede dar. Las mismas al no propinar el abuso de forma física lo hacen de forma verbal y social: exclusión de grupos, creación de rumores, burlas ofensivas, y otros. 
  5. El acoso escolar es pasajero: Aunque si es cierto que algunos niños superan espontáneamente ciertas conductas y actitudes, la dinámica de acoso escolar es disfuncional por lo cual la superación no se da de la misma manera. Si no se interviene a tiempo, la conducta se puede dar hasta la adultez. 
  6. Si la escuela no interviene, los padres no pueden hacer nada: Erróneamente los padres entienden que la administración escolar y los maestros son quienes único deben manejar el caso. Los padres deben estar muy atentos en todo momento de que sus hijos no presenten señales de acoso. De ser así, deben saber que es una violación a la ley.
[Capítulo III de la Ley Núm. 149 de 1999, según enmendada, conocida como “Ley Orgánica del Departamento de Educación de Puerto Rico”]


Es importante reconocer las señales básicas de acoso o intimidación:
·      Volver a la casa con ropa, libros, bultos, u otras pertenencias rotas, dañadas, “perdidas”;
·      Presentar golpes, moretones, cortes, rasguños o accidentes inexplicables;
·      Cambios de comportamiento:
o   Ir a la escuela les provoca miedo
o   No pueden dormir bien,  tienen pesadillas
o   Dejan de compartir con sus pares/ amistades
o   Presentan síntomas de depresión (cambio en el humor, tristeza constante, falta/aumento de apetito, mal humor, molestias físicas), sobretodo al regresar de la escuela
o   Baja autoestima
o   Mentir (para esconder su problema)
o   Desquite de coraje contra hermanos/amigos/mascotas/juguetes (en algunos casos)
o   Ansiedad psicológica y/o física, especialmente al dirigirse a la escuela
·      No dar una explicación clara de incidentes escolares o evitar preguntas de los padres. (Contestar con “No se”, “No me acuerdo” o una mentira)
Si un niño es victima de acoso escolar es muy importante que en el momento en que el niño lo comunique los padres mantengan la calma y le den apoyo al niñoEs muy común que los niños no informen sobre el problema ya que el victimario utiliza amenazas y aumentan su miedo. Los padres no deben tomar esta falta de comunicación de forma personal que resulte en castigo/regaño para la víctima. 

Referencias:
Olwenus, Dan, Bullying en la escuela: datos e intervención, Factores de riesgo de la Violencia Escolar, Violencia y Escuela, IX Reunion Internacional sobre Biologia y Sociologia de la Violencia. Valencia, España, 2005. 
Olwenus, Dan, Conductas de Acoso y Amenaza entre Escolares. Ediciones Morata, Madrid, 1985. 
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*La autora, quien es terapista psicológica de niños, adolescentes y familia, es la fundadora y presidente de The Magis Foundation.  Cursó sus estudios graduados en Loyola University New Orleans y trabajó en New Orleans, Louisiana con sobrevivientes del huracán Katrina. Entrenó en terapia de familia, desarrollo humano, Play Therapy ®, duelo,  resiliencia, abuso de sustancias,  manejo de crisis entre y desarrollo organizacional entre otros.   Ella cuenta con varios años de experiencia trabajando con entidades comunitarias enfocadas en el desarrollo social, apoyo familiar, apoyo a niños y adolescentes y crecimiento personal.

Sobre La Depresión


La depresión se puede describir como el hecho de sentirse triste, melancólico, infeliz, abatido o derrumbado. La mayoría de nosotros se siente de esta manera una que otra vez durante períodos cortos.

La depresión clínica es un trastorno del estado anímico en el cual los sentimientos de tristeza, pérdida, ira o frustración interfieren con la vida diaria durante un período de tiempo prolongado.

Consideraciones generales

Los síntomas de depresión abarcan:
  • Estado de ánimo irritable o constantemente bajo
  • Pérdida de placer en actividades habituales
  • Dificultad para conciliar el sueño o exceso de sueño
  • Cambio dramático en el apetito, a menudo con aumento o pérdida de peso
  • Fatiga y falta de energía
  • Sentimientos de inutilidad, odio a sí mismo y culpa inapropiada
  • Dificultad extrema para concentrarse
  • Movimientos físicos agitados o lentos
  • Inactividad y retraimiento de las actividades usuales
  • Sentimientos de desesperanza y abandono
  • Pensamientos recurrentes de muerte o suicidio

Cómo detectar depresión en los niños y adolescentes


La depresión se define como una enfermedad cuando la condición depresiva persiste e interfiere con la habilidad de funcionar del niño o adolescente. Es muy normal que un por ciento de la población general padezca de depresión en algún momento. Los niños que viven con mucha tensión, que han experimentado una pérdida o que tienen desórdenes de atención, de desarrollo, de aprendizaje, de conducta, o de ansiedad corren mayor riesgo de sufrir depresión. La depresión también tiende a correr en las familias.


El comportamiento de los niños y adolescentes deprimidos puede ser diferente al comportamiento de los adultos deprimidos. Los profesionales de salud mental de niños y adolescentes le recomiendan a los padres que estén atentos a síntomas de depresión que puedan presentar sus niños, ya que la depresión es una condición tratable.